Neuromarketing: pistas para la innovación hostelera
El neuromarketing consiste en la aplicación de técnicas utilizadas en la neurociencia al ámbito del marketing. En función de los resultados obtenidos en el estudio de determinados estímulos se aplican unas técnicas u otras.
Un ejemplo de esto es el modo de colocar los diferentes productos de un hipermercado o la situación de los lineales. ¿Y qué tiene que ver el neuromarketing con la hostelería? En este breve artículo vamos a dar unas pequeñas pinceladas sobre sus posibles aplicaciones.
Una estudiada iluminación en el local, si esta es suave, invita al cliente a quedarse más tiempo, lo que se implica más consumo, si por el contrario la iluminación es fuerte, el cliente se irá en cuanto acabe su consumición, lo que genera más rotación. Del mismo modo el uso ciertos colores incitan a consumir, por ejemplo, varios estudios relacionados con este campo, indican que los colores rojo y naranja aumentan el apetito.
Por todos es conocido que la música ejerce un gran poder sobre la mente. La Universidad de Leicester realizó un estudio donde corroboró que en aquellos bares y restaurantes donde suena música suave o clásica, la gente es propensa a gastar más. Esto es debido a que se perciben a sí mismos con mayor capacidad adquisitiva.
Menús diseñados con neuromarketing
Ahora bien, una de las aplicaciones más más eficaces de esta herramienta es la creación de la carta o el menú. Si aplicamos las técnicas del neuromarketing para su diseño, lograremos tener en nuestro establecimiento aquellas cosas que producen un mayor deseo en los clientes.
Algunos consejos para que tu menú sea maravilloso:
- Describir los platos con gran detalle. Se ha demostrado que cuanto más se describen los componentes de una carta, más apetecible le parecerá al comensal.
- Poner nombres familiares a los platos.Dar un nombre propio a un plato es otro factor que a tener en cuenta para conseguir convencer. Porque entre «Tarta de queso» y “Tarta de queso de la abuela Carmen” atrae mucho más esta última.
- Elección de precios.El truco muy utilizado en el sector de la modo, de poner en lugar de “20 €”, “19,99 €”, en restauración no es tan apenas percibido, al mismo tiempo que se puede llegar a ver como una rebaja en la calidad. Sin embargo, si los precios se expresan en múltiplos de cinco esta percepción cambia. Según un estudio de la Cornell University “el precio se percibe como menor pero sin la sensación de regateo”.
- Otro punto a tener en cuenta es la colocación del símbolo del euro junto al precio. No será lo mismo poner 20€ que 20, o en algunas ocasiones reducir el tamaño del símbolo. El subconsciente del cliente va a percibir esto como que el desembolso que se va a llevar a cabo va a ser menor.
- Destacar visualmente aquello que más interese. Está demostrado que se presta más atención a lo que aparece en nuestra derecha cuando leemos algo. Por ello, es recomendable colocar en esa parte de la carta los platos que se quieran destacar.
Algunos de estos aspectos del neuromarketing y junto con otras técnicas de menú engineering forman parte de la innovación que se lleva produciendo los últimos años en hostelería. Saber combinar buenos productos y atención de calidad con estas nuevas técnicas permiten a los restaurantes aumentar sus márgenes de rentabilidad y mejorar su imagen de marca.